Por Marco Gómez
Es normal que un jugador como Hulk se lleve la mayoría de los reflectores sobre él cuando sale al campo de juego. El jugador brasileño posee una destacado trayecto futbolístico en el fútbol internacional y llama la atención por su portento físico, del cual se vale para ganar duelos individuales con potencia y sacar remates con la mis característica.
El duelo versus Millonarios por la fase 3 de la Copa Libertadores no fue la excepción y el delantero se creó espacios en los que pudo rematar directamente al arco capitalino, a pesar de que los defensores de Millonarios tuvieron un partido aceptable, teniendo en cuenta la calidad de los rivales de turno.
Sin embargo, cada vez que el exjugador del Porto de Portugal remató al pórtico embajador, se encontró un seguro y bien plantado Álvaro Montero que sacó de todo en el compromiso, hasta donde puedo, pues fue vencido en una sola ocasión por Paulinho, pero el duelo personal versus Hulk se lo llevó el portero.
El primer acercamiento del brasileño se dio cuando Atlético Mineiro comenzó a despertar en el juego, luego de que Millonarios empezara dominando con posesión, en donde remató desde media distancia con potencia, pero el portero colombiano paró el remate en un tiempo y sin contratiempos.
Luego, Hulk tendría la chance más clara en todo el partido cuando se escapó solo contra el arquero, que salió a achicarle con pocas posibilidades, pero finalmente el delantero escogió mal al tratar de definir por encima de Montero, pero la pelota se fue desviada. En el segundo tiempo remató en dos ocasiones más, pero de nuevo Montero ganó los duelos.
14/03/2025
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